Día 19 Hawaii Kawai
Empezamos el día muy temprano, 5.30, para poder
dejar el coche en el aeropuerto de Oahu a las 6.30. Dejado el coche, y
completados los trámites en el check-in nos dirigimos a la puerta de embarque.
En el control, sin embargo, sospechan de las pintas de Juanlu y le hacen un
buen registro, con lamido del ordenador incluido.
Tras 45 minutos de vuelo, llegamos a Kawai, donde
cogemos coche, y nos vamos directos al Cañon de Waimea, y a los miradores de la
carretera. Es un paisaje muy chulo, todo en colores verdes y rojos, y con
cataratas.
Toca hacer la colada, y aprovechamos para alguna compra, así
que se nos pasa la tarde con los deberes.
Cenamos en la terracita del chalecito que tenemos
por habitación unas palomitas que hemos comprado en el súper, y vemos la
primera de American Pie, en versión original.
Día 20 Hawaii Kawai
Segundo día en Kawai, y nos levantamos
tranquilitos, desayunando café y frutita en el hotel, seguido de un poco de
crema de galletas lotus que compramos el día anterior.
Nos ponemos rumbo a ka’a beach donde nos han
dicho que se hace buen snorkel, al norte de la isla. La carretera es súper
chula, y la playita también.
Después subimos un poco por un trail para ver la
playita desde arriba y la Napali Coast.
Comemos en Hanalai en la zona comercial de Ching Young Village, otra vez algo típico hawaiano y nos tomamos nuestro primer SHAVE ICE, que es típico y está sorprendentemente bueno.
Volvemos al hotel para darnos un bañito en la
pisci del hotel y el jacuzzi hasta que anochece.
Tras la duchita, nos vamos a cenar a Lihue, que a
pesar de ser sábado, tiene escaso ambiente y sólo encontramos abierto el Mc.
Donalds.
Día 21 Hawaii Kawai
No madrugamos mucho, y cuando nos levantamos
vamos a preguntar por alguna actividad chula en la isa, pero ya es muy tarde, y
no hay, y optamos por ir a ver las distintas zonas de cascadas que hay en la
isla.
Nos gustan mucho las de Wailva Falls, al lado del
hotel.
De camino a la playa de Poipu, donde también se hace snorkel, nos encontramos con la plantación de Kilohana, que recomendaba la guía, así que entramos y cogemos el trenecito que la recorre.
De camino a la playa de Poipu, donde también se hace snorkel, nos encontramos con la plantación de Kilohana, que recomendaba la guía, así que entramos y cogemos el trenecito que la recorre.
No nos enteramos mucho pero ésta bien porque es diferente.
Llegamos a Poipu con hambre así que comemos en el único restaurante que vemos con súper vistas a la playa (Brennecke’s).
Pedimos dos “pupus” o aperitivos (uno degustación de sus platos, y unas coconut shrimps, que nos gustaron mucho el otro día) y nos quedamos con hambre así que optamos por dos súper postres.
Pasamos la tarde en la playa, haciendo snorkel, y disfrutando la tranquilidad.
Esperamos al atardecer, que resulta precioso de color, y curioso con los surferos al fondo.
Volvemos al hotel y nos comemos otras palomitas
mientras vemos American Pie II.
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